Centenario del Genocidio Armenio: todos seamos parte

Falta poco más de un mes para que se cumplan 100 años del Genocidio Armenio y se avecinan importantes actividades conmemorativas, que arrancan este jueves 19 de marzo a las 19 con una misa en la Catedral Metropolitana de Buenos Aires.

La Comisión del Centenario del Genocidio Armenio, en la que están representadas todas las instituciones armenias y además recibió voluntarios a través de una convocatoria abierta que se realizó para integrar las distintas subcomisiones, brindó ayer una conferencia de prensa anunciando el programa completo de actividades.

A su vez, se ha creado una página de Facebook oficial (www.facebook.com/centenariodelgenocidioarmenio), que es una de las más activas de la diáspora y se actualiza constantemente con diferentes contenidos e información sobre cada evento.

Es muy importante la participación de toda la comunidad, fundamentalmente asistiendo masivamente a los actos, pero también se puede colaborar compartiendo la información en las redes sociales, invitando a los eventos a sus contactos, colocando carteles en los negocios (habrá disponibles avisos gratuitos de “Cerrado” por el 24 de Abril), y demás acciones cotidianas en las que cada uno puede contribuir.

Cien años de lucha inclaudicable que ha caracterizado a la comunidad armenia del mundo y de Argentina con importantes logros y conquistas, deben verse reflejados hoy más que nunca.

No podemos permitir que la insistencia haga perder de vista el aspecto más elemental y doloroso de esta conmemoración y nos lleve a olvidar su dimensión o correr el foco: hace cien años, un millón y medio de personas fueron masacradas brutalmente y sometidas a todo tipo de vejámenes tan sólo por su nacionalidad armenia, y ese crimen de lesa humanidad aún no ha sido reparado. El Estado perpetrador lo continúa negando, pero nuestros abuelos y bisabuelos han sido testigos presenciales de esa atrocidad y hemos oído sus historias, que además están ampliamente documentadas.

La reivindicación de la memoria de nuestros mártires no la hacemos desde la victimización, sino en reclamo de verdad y justicia, pilares indispensables sobre los cuales se puede construir un futuro de convivencia armoniosa y fundamentalmente para que nunca más haya genocidios en ninguna parte.

Por eso en las actividades, además de recordar a las víctimas, destacamos el triunfo de la vida frente a la barbarie y compartimos nuestra cultura y arte milenarios, que no han sido silenciados.

Es un mensaje de paz muy valioso que la comunidad armenia tiene para transmitir, el cual trasciende a nuestra colectividad y amerita el involucramiento de todos.

El granito de arena que cada uno pueda aportar desde su lugar, haciéndose presente en los actos, colaborando con la difusión, suma.

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